INVESTIGADORES ESTADOUNIDENSES LOGRAN UN ELECTROLITO QUE PROMETEN BATERÍAS CON CAPACIDAD DE CARGARSE EN 10 MINUTOS
El grupo de científicos de la ORNL de Tennessee han conseguido, además, que este electrolito de alta capacidad consiga una vida útil de la batería de 1.500 ciclos. La base está en el uso de nuevas formulaciones de sales de litio con disolventes de carbonato para generar un electrolito que optimiza el flujo de electrones.
En el constante esfuerzo por mejorar las baterías de iones de litio, la ciencia está dando un nuevo impulso para aumentar su rendimiento y capacidad de recarga. La clave de este avance parece residir en los electrolitos, que actúan como conductores para transportar iones eléctricos entre las placas positivas y negativas durante la carga y descarga de la batería.
En el Oak Ridge National Laboratory de Tennessee (ORNL), un grupo de investigadores estadounidenses ha logrado un hito impresionante: han desarrollado un nuevo electrolito para baterías de iones de litio que permite cargarlas hasta un 80% en tan solo 10 minutos, con una vida útil de 1,500 ciclos. Este avance desafía las expectativas convencionales y promete revolucionar la industria de la movilidad eléctrica.
El secreto de esta innovación radica en la utilización de nuevas formulaciones de sales de litio combinadas con disolventes de carbonato, creando un electrolito que optimiza el flujo de electrones y resiste el calor generado durante las sesiones de carga ultrarrápida.
Este electrolito de vanguardia incluye elementos químicos como la bis(fluorosulfonil)imida de litio (LiFSI), el hexafluorofosfato de litio (LiPF6) y carbonatos en celdas de bolsa de 2 Ah. En pruebas a una tasa de carga de 6C, el compuesto exhibió una sorprendente estabilidad electroquímica. Sin embargo, el costo de producción a gran escala aún se mantiene como una incógnita.
Este mismo equipo de investigadores había presentado previamente un método innovador para la fabricación de baterías de electrolito sólido más estables y eficientes. Este proceso elimina virtualmente las pequeñas bolsas de aire que suelen formarse en los materiales procesados de manera tradicional, lo que acelera significativamente la velocidad de carga de las baterías.
El proceso de creación de este electrolito de alta capacidad implica calentar la prensa después de aplicar el electrolito sobre ella y luego dejar que se enfríe bajo presión, resultando en un material conductor casi mil veces más eficiente. Como explicó Marm Dixit, investigador principal del ORNL, “es el mismo material, solo cambiamos la forma de fabricarlo, y esto mejora el rendimiento de las baterías eléctricas en varios aspectos”.
Esta innovación está marcando el comienzo de una nueva era en la producción a gran escala de electrolitos, brindando un mayor control sobre su estructura interna. Toyota, en particular, ha mostrado interés en esta tecnología de electrolito sólido, con el objetivo de desarrollar vehículos eléctricos con mayor autonomía y tiempos de carga significativamente reducidos. Este avance científico promete impulsar aún más la revolución eléctrica en la industria automotriz.
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