¡COMENZÓ LA TEMPORADA DE LLUVIA!, AQUÍ TE DEJAMOS UNA SERIE DE RECOMENDACIONES PARA UN VIAJE MÁS SEGURO
Cuando estamos al volante bajo la lluvia, es crucial adoptar una postura defensiva, garantizar un mantenimiento adecuado del vehículo y estar atentos a las condiciones climáticas. A pesar de que hemos ingresado recientemente al otoño, ya hemos experimentado precipitaciones en todo el país, lo que significa que conducir en estas condiciones será cada vez más común a medida que nos acerquemos al invierno. La lluvia nos exige ser más precavidos al conducir, aunque esta precaución no siempre se manifieste de inmediato.
Al visualizar la experiencia de conducir bajo la lluvia, podemos anticipar los principales desafíos que podríamos enfrentar: calles mojadas y resbaladizas, poca visibilidad, charcos en la carretera y un mayor congestionamiento de tráfico. Estos son los principales efectos que la lluvia tiene en nuestra experiencia al estar al volante.
Aquí te presentamos algunos consejos que pueden servirte para conducir de manera más segura cuando las condiciones climáticas no son favorables, además de señalar qué aspectos deben estar en condiciones óptimas para afrontar estas situaciones.
En primer lugar, es esencial evaluar las condiciones del tiempo y del entorno antes de iniciar el viaje. A menos que sea una emergencia, es recomendable evitar conducir en condiciones como fuertes lluvias, granizo o cuando la visibilidad se vea comprometida por neblina o nubosidad.
- Evitar conducir en condiciones climáticas adversas: A menos que sea una situación de emergencia, es recomendable abstenerse de conducir cuando las condiciones climáticas son extremas, como lluvias torrenciales, granizo o cuando la visibilidad se vea comprometida por neblina o nubosidad.
- Mantener una distancia segura entre vehículos: Es crucial mantener una distancia considerable con respecto al vehículo que va delante, especialmente en pavimentos mojados, dado que la distancia de frenado se incrementa hasta en un 50%, lo que podría no ser suficiente para evitar un accidente.
- Revisar el estado de los limpiaparabrisas: Es fundamental asegurarse de que los limpiaparabrisas estén en buen estado y funcionando correctamente, ya que de lo contrario podrían dificultar la visibilidad, especialmente en condiciones de suciedad o mal funcionamiento.
- Mantener los neumáticos en óptimas condiciones: Debido a que el agua reduce la adherencia del pavimento hasta en un 50%, es importante verificar el estado de los neumáticos, especialmente el dibujo o surcos, los cuales ayudan a evacuar el agua y mantener el contacto de la llanta con el pavimento para evitar el riesgo de aquaplaning.
- Luces: En situaciones de lluvia, es fundamental mantener las luces del vehículo en buen estado para mejorar nuestra visibilidad ante otros conductores y facilitar nuestra propia visión del camino mientras conducimos. Es crucial tener en cuenta que, en ciertos momentos o condiciones, puede ser necesario utilizar las luces altas. Sin embargo, las gotas en el parabrisas pueden causar deslumbramiento al conductor, por lo que es necesario usarlas con precaución y solo cuando sea absolutamente necesario.
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